Amar y arder
¿Cuál es el riesgo de amar a una mujer siendo otra, en una época que condena ese amor con crueldad? ¿Cómo es posible materializar ese riesgo? En esta escena de la película Retrato de una mujer en llamas Céline Sciamma realiza, a partir del trabajo con ciertos materiales, una representación de lo que asumir ese riesgo significa, convirtiéndola en uno de los momentos bisagra de su film.
La escena comienza y vemos a nuestras protagonistas llegar a una fogata en la playa, donde desde un primer momento nos es presentado el material fundamental; el fuego. Ya el título de la película nos da un indicio pero aquí es cuando realmente lo vemos en juego con ellas de forma directa. Como elemento, el fuego ha sabido representar la pasión, el calor, el impulso. Pero también muchas otras veces suele sugerir el pecado, el infierno o incluso la muerte. Entendiendo a los materiales como “una de las decisiones esenciales de la realización, en la medida en que la producción artística consiste en un proceso dialéctico entre la idea y su materialización.“ (Ciafardo, 2020, p.90) vemos cómo la directora saca provecho de este doble valor del elemento en su película, y más específicamente en esta escena.
Las únicas fuentes de luz iluminando el lugar son las de la luna y la fogata, lo que nos ubica en un espacio y ambiente de intimidad. Al principio todo parece normal, Héloïse y Marianne acompañan a Sophie a averiguar sobre el estado de su embarazo. Sin embargo, la escena parece dar un giro en el momento en que el resto de las mujeres comienzan a cantar, aspecto que será el segundo material importante aquí. De a poco sus voces comienzan a generar un clima más tenso, como si anticiparan alguna especie de revelación. La repetición constante de la frase “No pueden escapar” desemboca en lo que suena como una armonización más angelical y luego vuelve, con la incorporación de los aplausos y los susurros, a tensarse. ¿De qué no pueden escapar las protagonistas?. Escuchamos las voces cada vez más y más agudas, que parecieran estar acercándonos a un clímax. Y es cuando Marianne cruza miradas con Héloïse que como espectadores empezamos a encontrar esa respuesta; comparten sonrisas, pero una vez que las chispas y el humo de la fogata empiezan a superponerse a la imagen de Héloïse la cosa cambia y las sonrisas se transforman en expresiones serias. El fuego es el elemento revelador que de a poco nos anticipa el final.
Los gestos de las protagonistas constituyen el tercer material que construye esta representación. Marianne ve las llamas y detrás a Héloïse, esta composición del plano (el fuego entre ellas) las voces que cantan y sus gestos sugieren la idea de que en ese momento ambas descubren o en realidad terminan de aceptar que están enamoradas la una de la otra. El fuego aquí está materializando ese sentimiento, pero también la consciencia de que su amor es en realidad imposible, un pecado; aceptación y temor. La tensión construida desemboca en el vestido de Héloïse quemándose y el cese del canto, el clímax de la escena.
Pero, ¿qué pasa? Héloïse y Marianne notan el vestido, escuchamos las voces angelicales entonando la frase “Nos volveremos a elevar” y con ellas la revelación final; están enamoradas. Ninguna de las dos hace nada por apagar ese fuego, y es entonces cuando el elemento y la no-acción de los personajes nos dan a entender que están dispuestas a arriesgarse, a arder en el infierno por ese amor. Retomando las ideas de Ciafardo, vemos cómo el diálogo entre la idea y su materialización no se detiene hasta que la escena tiene su cierre.
La escena siguiente termina de concluir la idea que Sciamma viene construyendo hasta el momento. Es el mismo lugar pero ahora iluminado por la luz del sol. Pero por más que estén solas ya no se siente la misma intimidad, ese secreto que las miradas nos revelaron anteriormente, y las protagonistas tienen la claridad para pensar detenidamente. Las voces angelicales todavía nos acompañan en lo que parece ser una pequeña persecución de Marianne hacia Héloïse que se cierra con el primer beso entre las protagonistas “...de nuevo el deseo amoroso ardía por todas partes. Era como si quisiera estrechar una última vez, con locura, a alguien que iba a morir.” (Barthes, 1998, p.130)
Bibliografía:
Arrieta, C. Ciafardo, M. Dillon, M. Medina, P. (2020) La ampliación de los materiales en el arte actual. En Cifrado, M (Comp.), La enseñanza del lenguaje visual, bases para la construcción de una propuesta alternativa (p. 93-199). La Plata: Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Artes.
Barthes, R. (1998) Fragmentos de un discurso amoroso. Ciudad de México, México: Siglo XXI Editores.
Belinche, D. Mansilla Pons, R. Schwindt, J. Weingart, S. (2020). ¿Cómo lo hicieron? Rasgos comunes en la construcción de imágenes ficcionales en el arte. Octante, Revista del Departamento de Estudios Históricos y Sociales.
Filmografía:
Retrato de una mujer en llamas (Céline Sciamma, 2019)
ANÁLISIS CRÍTICO ESCRITO
